Zoku Sayonara Zetsubou Sensei REVIEW

Bueno, de nuevo se nos marcha una gran serie, y con ella se lleva ese sentimiento de impaciente espera por que sacaran un nuevo capitulo, todas las carcajadas ahogadas y esa sonrisa que no deja que huya de tu rostro mientras disfrutas de esos dorados y brillantes 24 minutos. ¿Qué decir de nuestro Zetsubou Sensei favorito? Una gran producción independiente que (rallos y retruécanos) ha pasado casi desapercibida por el público en general, obra maestra de SHAFT y de Koji Kumeta, su autor (¡sí! el calvo que aparecía en todos los capítulos de la primera temporada y que en esta segunda ha aflojado su omnipresencia). Pasaré entonces a resumir los principales pros y contras del anime: (Mostrar entrada entera)

Puntos a favor: - Un perfecto guión que, pese a tener muy poco de cohesión, te hace desternillar de risa con sus toques de humor ácido y deslenguado. Capítulos divididos primero en 2 y luego en 3 historias, todas de ellas diferentes y en las que se critican aspectos de la sociedad, personalidad humana, historia, tópicos, anime... todo un banquete.

- Un estilo de dibujo original, innovador, con toques retro y que juega con la mente del seguidor, pues abundan los detalles, las referencias, el juego de colores...

- Los personajes, bien perfilados y, pese a ser irreales, perfectas metáforas de estereotipos existentes. Kafuka, Chiri-chan, Maria, Otonashi... y, como no, Itoshiki (despair teacher powaa).

- Fidedignos al manga en un 90%, sin apenas cambios de trama ni dibujo. Un puntazo para ellos.

- GENIAL OST, con sus respectivos openings. El Despair Minuet es una obra maestra.

- El que sea una alternativa perfecta para aquellos hartos de los convencionales shonens de hoy en día, incluso de algunos seinens, repetitivos hasta la saciedad.

- Buff... que puedan concentrar tanta buena calidad en tan pocos episodios.

Puntos en contra (me esforzaré): - Su excesivo nivel de bizarrismo, que puede asustar a los menos preparados.

- Su casi total falta de hilo temporal y argumental, con personajes que van y vienen sin ton ni son. Muchos desaparecen por el camino y otros los redescubrimos por sorpresa.

- Las alusiones a la sociedad nipona, de las cuales no nos enteramos ni de la mitad solo por el hecho de no vivir allí. Es un mal menor de todas formas.

- Su brevedad. ¡Quiero más!

- Que no sea famoso el anime (T.T... como cambiarían las cosas)


Hum... creo que lo dejaré aquí. Es un anime complejo (muchos detalles) y a la vez simple (¡sí! solo hace falta tener ganas de echarse unas risas inteligentes para verlo), recomendable junto a Suzumiya Haruhi para TODOS y casi de obligado cumplimiento. Solo me queda exigir a la omnipoderosa diosa Haruhi que ilumine la creatividad (y los bolsillos) de SHAFT para que se animen a una tercera temporada, que capítulos en el manga hay para ello. Esperemos que sí. ¡A disfrutar de la serie, desesperados!

PD: ¿Tanto se nota que soy un fan incondicional de Itoshiki?